En Venezuela, el derecho a la justicia para las mujeres se garantiza mediante la Constitución y leyes como la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, que busca prevenir, atender y erradicar la violencia de género. Sin embargo, existen barreras significativas en la práctica, como la discriminación de género y la falta de acceso a servicios legales gratuitos. Se han implementado esfuerzos institucionales, como la Comisión Nacional de Justicia de Género, para mejorar el acceso a la justicia, especialmente para grupos vulnerables como mujeres indígenas, afrodescendientes, con discapacidad y de bajos ingresos.